La función principal que cumplen las bombas para piscinas, ya sean éstas sumergibles o de superficie, es la filtración y recirculación del agua. Como dijimos anteriormente, esta es una tarea muy importante para el correcto mantenimiento de nuestra piscina y es por ello que contar con la bomba adecuada resulta poco menos que esencial. A modo de guía, y más allá del tipo de bomba que se desee instalar, el consejo es que cumpla con las siguientes características: deben traer incorporado un sistema de protección térmicala temperatura máxima en la que deberían trabajar es de 35ºC), además de contar con un eje (donde va colocado el motor) de acero inoxidable, mientras que el resto de sus partes también deberían ser resistentes a la corrosión. Asimismo, es aconsejable elegir bombas que no demanden un mantenimiento demasiado exhaustivo y que no requieran de herramientas especiales para su instalación. Aún así, siempre será necesario un mantenimiento mínimo, para asegurarnos de que el equipo funcione correctamente. De este modo, se recomienda limpiar periódicamente el filtro de la bomba y vaciarla durante los períodos de bajas temperaturas o inactividad prolongada. También es aconsejable, en el caso de las bombas sumergibles para piscinas, que los filtros que traiga la bomba sean de acero inoxidable, con el fin de evitar que cualquier cuerpo extraño ingrese en la bomba y pueda averiarla (es muy común que la suciedad obstruya la turbina de la bomba y ésta termine quemándose). (puede que estén expuestas a temperaturas muy altas o bajas, pero tengamos en cuenta que
Afortunadamente, existe una gran variedad de tipos de bombas y es posible encontrar uno para cada tipo de piscina, sea ésta desmontable, de hormigón, pequeña, mediana o incluso de gran tamaño. Las ventajas de las bombas sumergibles es que resultan muy útiles en su facultad de poder ser utilizadas para limpiar el fondo de la piscina (aunque, por otro lado, trasladarlas constantemente de un lugar a otro puede resultar perjudicial para su funcionamiento), mientras que las bombas de superficie se colocan a unos pocos metros de la piscina, generalmente dentro de un cubículo protector especial. Se ha comprobado que no existen diferencias en cuanto al rendimiento de estos dos tipos de bombas para piscinas, aunque las bombas sumergibles cuentan con una mayor demanda y reputación, principalmente a causa de su doble función. En cuanto a los tamaños de las bombas, por lo general esto estará directamente relacionado con el tamaño de la piscina en la que sea instalada y el caudal de agua por hora que se pretenda manejar.
En los últimos años, y en parte gracias a los importantes avances logrados en los accesorios para piscinas, se ha desarrollado un novedoso sistema de bombeo, el cual funciona a partir de la energía solar. Este tipo de bombas son sumergibles y reciben la energía de unos paneles de energía solar, que se encuentran ubicados a unos pocos metros de la piscina, y con los cuales están unidos mediante conexiones bajo tierra. Este sistema aún no ha sido completamente desarrollado, pero supone un gran avance, ya que elimina del todo el gasto de energía eléctrico generado por la bomba, aunque, por otro lado, presenta el problema de cualquier sistema que funcione a base de energía solar: sólo podremos contar con él mientras el cielo esté medianamente despejado y la bomba pueda recibir la luz del sol.