Un pequeño gran jardín en el hogar
El pequeño gran jardín que aquí le presentamos tiene dos accesos, uno desde el living y otro desde la cocina. En el área que se encuentra frente al ventanal, se dispusieron las plantas contra las paredes, enmarcadas por un colchón de césped. En la pared opuesta a la ventana, una pequeña fuente atrapa las miradas y aporta frescura. Frente a la cocina, el césped fue reemplazado por baldosones de cerámica en color negro, aptos para el tránsito constante de gente y para improvisar -con mesas y sillas- un perfecto comedor al aire libre Este solado se extiende en forma de sendero entre la ventana del living y el césped.Efectos especiales en el diseño del jardín
Existen recursos puntuales que permiten dar a un jardín pequeño una mayor sensación de amplitud. Á continuación, le mostramos los trucos utilizados en nuestro ejemplo
- Se eligieron plantas de formas llamativas, de hojas grandes y muy frondosas, para evitar la monotonía de un espacio reducido.
- Al limitar el área de césped a un solo sector, se dispone de un solado en el que se pueden formar borduras de plantas. Además, hace que estos espacios sean más prácticos y funcionales, especialmente en invierno, época en que el césped está casi siempre húmedo.
- El espacio cubierto por los baldosones aporta el lugar de tránsito necesario para conservar el césped en buen estado y evitar embarrar los ambientes interiores cuando abunda la humedad. Permite también agregar una mesa para aprovechar el jardín como si fuera un living al aire libre.
- La fuente de piedra contra la pared, con sus pequeñas acuáticas, brinda un toque original al espacio. Vista desde el living, aparece enmarcada por dos Papiros que, con tres años de vida, han alcanzado un tamaño importante.
- En un rincón sombrío los helechos dan un aire selvático. El Ampelopsis (parra virgen) crece y trepa plantas por las paredes.
- La presencia de un árbol amplía hacia arriba los límites del jardín. En este caso, se eligió un Aliedul (Betula alba), un árbol de tronco pequeño, poco compacto, que filtra algunos rayos de sol en verano.
- Los jardines pequeños pueden ganar dimensión si se tapizan sus paredes con plantas trepadoras. El Ampelopsis es una de esas especies. No requiere sostén y alcanza hasta 20 metros de altura. A diferencia de la Enamorada del muro, puede prescindir de la poda y no junta insectos entre sus hojas, ya que sus largos pecíolos hacen que se dispongan separadas de las paredes. En otoño sus hojas se tornan rojizas y al cabo de un mes caen, quedando sus ramas al desnudo. Crece con rapidez y si se la planta cada tres metros, logra cubrir una pared de dos metros de altura al cabo de un año. Puede vivir en maceta y al adherir sus raíces a las paredes absorben, aunque en forma mínima, la humedad.
- Azaleas en invierno y Alegrías del hogar en verano aportan sus colores en la gama de los rosas. Así, las plantas que están enmarcadas por el césped forman una escenografía sorprendente.
- En los canteros se plantaron Viburnum tinus, Helechos, fizaleas y Alegrías del hogar
