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Tu jardin y piscina en manos de confianza

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Consejos en la instalacion de su pileta de natación

En primera instancia, es necesario decidir el lugar exacto donde estará situada la piscina. Para ello, deberíamos tener en cuenta unas breves sugerencias: que la piscina se ubique en el lugar del jardín que reciba la mayor cantidad de sol durante el día, que tratemos de no ubicarla cerca de árboles muy frondosos y que tengamos en cuenta que, si bien los desniveles del terreno por lo general no deberían impedir que instalemos la piscina allí, pueden entorpecer las obras y ser una verdadera molestia. Estos tres consejos, por obvios o poco relevantes que parezcan, son la base de cualquier chequeo previo a la instalación de una piscina, aunque hay muchos más y algunos dependerán del entorno en el cual se coloque la piscina (como la proximidad con las casas vecinas o el espacio mínimo que debe existir entre la piscina y la máquina depuradora).
Luego de chequear estas cuestiones fundamentales, es hora de hacer algo bastante más interesante y entretenido: elegir la forma de la piscina. Para esto, debemos tener en cuenta también el material, ya que si elegimos la madera, por ejemplo, como material para nuestra piscina, no tendremos las variantes de diseño que tendríamos en caso de elegir una piscina de acero, que presenta tantas posibilidades en su forma como a uno se le ocurran. Pero en esta parte entran en juego las preferencias de cada uno (las posibilidades, incluso), por lo que es tarea exclusiva del futuro usuario de la piscina considerar todas las posibilidades y ver cuál es la que mejor se adapta a sus necesidades particulares. Desde aquí, tan solo nos limitaremos a comentar brevemente las características más sobresalientes en las instalaciones de algunos tipos de piscinas.
 En caso de que hayamos decidido instalar una piscina de hormigón, la opción más común y aún hoy la más solicitada, debemos ser conscientes que las obras para su instalación requieren de varios días y resultan bastante complejas, ya que este tipo de piscinas generalmente se construyen en una sola pieza y su traslado y posterior emplazamiento en el lugar indicado resulta una maniobra que requiere de verdaderos expertos. Este tipo de instalación requerirá varios hombres trabajando y un tiempo estimado de puesta a punto de entre 10 y 15 días, siempre y cuando se aproveche al máximo cada día. Recientemente, ha surgido una alternativa para las piscinas de hormigón que abarata los costos finales y agiliza los tiempos de instalación; las llamadas piscinas de “hormigón proyectado”. Aún así, las piscinas de hormigón son aún hoy las más comunes y aquellas que más costosas resultan, junto con las de acero.
Las piscinas de madera, por su parte, requieren de una instalación igualmente compleja, ya que los paneles o las tablas de la madera escogida se deben colocar en forma muy cuidadosa, pues, si bien estas piscinas son muy resistentes, pueden averiarse con facilidad en caso de que no se las instale con la pericia necesaria. Los tiempos de terminación se asemejan a los de las piscinas de hormigón, pero los costos son considerablemente menores.
En cuanto a la instalación de las piscinas de acero, esta es señalada como la más sencilla y rápida de todas, ya que la estructura de este tipo de piscinas se compone de unos paneles de acero muy flexibles (aunque muy resistentes, también). Además, la instalación rara vez se prolongue durante más de 4 o 5 días y no requiere de un número de personas tan grande como las de hormigón. De todas formas, su elevado costo hace que muchos terminen inclinándose por las de hormigón (que son igual de resistentes que estas).


Lo cierto es que, más allá del material que finalmente elijamos, la instalación de piscinas puede convertirse en una verdadera pesadilla si no tenemos en cuenta algunos de los aspectos que ya mencionamos. Lo importante es asesorarse bien y trabajar con expertos; son los profesionales las personas más capacitadas para llevar a cabo la instalación de la manera más prolija y eficiente posible. Una vez que ellos comiencen a trabajar en el lugar, es válido que echemos un vistazo cada vez que lo deseemos (para asegurarnos de que todo marche bien), pero no debemos entorpecer su labor con indicaciones no calificadas, pues ello hará que la calidad final del trabajo se vea afectada.