Las piscinas son el lugar de relax por excelencia de aquellas viviendas  que cuentan con amplios jardines; en ellas no sólo solemos pasar un  bueno rato sino que son un excelente elemento para distendernos,  practicar deportes, y jugar con nuestros amigos y familiares. Pero como  toda construcción existen varios factores que debemos tener en cuenta  cuando llevamos a cabo su instalación; entre ellos el material del cual  estará fabricada, el cual seguramente será condicionado por el tipo de  piso que posea nuestra propiedad, sus dimensiones, sus componentes  (filtros, accesorios lumínicos, bombas, etc) y esencialmente su  ubicación. En lo que orientación respecta, un  natatorio no puede ubicarse en cualquier parte de un fondo, estos  se debe a que muchas veces, al no ser entendidos en la materia,  decidimos construir la piscina en un lugar determinado y no tomamos en  cuenta factores como la permanencia de los rayos solares, si existe  algún árbol que nos haga sombra y que a su vez pueda ensuciar el agua, o  cuyas raíces eventualmente puedan producir grietas en las paredes de la  misma. Por esto es fundamental que ante de empezar o decidir cualquier  tipo de construcción, nos informemos debidamente e  incluso analicemos fríamente el terreno con el que se cuenta para dar  con la mejor alternativa para realizar una eficiente orientación de la  piscina.
