Es importante que en el presupuesto esté especificado claramente cada detalle de la construcción, de otra forma puede haber malentendidos, ya que una piscina, sin importar el diseño o tamaño que tenga, requiere muchos materiales y es ninguno debe ser salteado en el presupuesto. Los principales puntos que debería contener un buen presupuesto son: en primer lugar, el sistema que se utilizará para construir la pileta (y esto estará directamente relacionado, claro está, con el tipo de piscina que se quiera construir), luego la cantidad del material que se requiera para la construcción (láminas de acero inoxidable, hormigón, maderas, etc.) y el tipo de terminación interior (ya sea pintura, revestimiento, etc.). Asimismo, es muy aconsejable que el presupuesto también incluya todas las especificaciones referidas al filtro: la marca, el tipo y la capacidad de éste, así como también todos los accesorios que vengan incluidos con él. Es importante tener en cuenta un dato que muchas personas desconocen y debemos estar seguros de que se cumpla: el filtro de agua debe tener una capacidad mayor al 30 % que el volumen total de la piscina.
Una vez que contemos con todos los presupuestos elaborados por las empresas encargadas de la construcción de piscinas, es hora de evaluarlos uno por uno y luego compararlos entre sí. Y ser conscientes de que, a pesar de que no habrá nadie más capacitado que nosotros mismos para elegir el tipo y diseño de piscina más adecuado para nuestro jardín, siempre es aconsejable pedir una segunda opinión; tal vez consultar a algún conocido que ya haya construido su pileta pueda ser de ayuda. Desde aquí, nos limitaremos a proveerlos de algunos consejos que pueden servir como guía orientativa a la hora de tomar la difícil decisión final