En un principio y si la empresa que se ha encargado de la construcción de su piscina ha sido profesional (debemos tener cuidado con la empresa que escojamos y tener siempre en cuenta que "a veces lo barato sale caro"), no deberíamos de encontrarnos con muchos problemas con nuestra piscina, sobre todo en el aspecto de fugas o pérdidas de agua.
No obstante, recuerde que la mayoría de las construcciones e instalaciones de piscinas cuentan con un periodo de garantía para posibles problemas que puedan subir en su piscina.
También es importante llevar a cabo una serie de tareas para el correcto mantenimiento de nuestra piscina
Las reparaciones de piscinas más frecuentes son las que tienen que ver con la fuga o pérdida de agua por el vaso, por los filtros, por las tuberías, por los skimers...
Para detectar y reparar una fuga o pérdida de agua es más que aconsejable contar con los servicios de un profesional en reparaciones de este tipo, ya que no suele ser fácil de detectar y para la reparación hay que tener especial cuidado de no dañar algún otro elemento de la piscina.
Otra reparación frecuente es la que tiene que ver con la depuradora de la piscina, por falta de presión, que le ha entrado agua al motor o que, directamente, se ha roto.
También se pueden dar problemas con la caída de gresites (si nuestra piscina esta recubierta de gresite), rotura de los focos de iluminación de la piscina, incrustación de arena en los filtros, reparación de las válvulas de cierre, sustitución de skimmers, reparación del limpiafondos, etc.