Nos dicen que ya no tendremos que usar pastillas, que ahorraremos mucho dinero, y que todo se hace de forma automática, sin que debamos preocuparnos por nada.
Yo defiendo que la cloración salina es seguramente el mejor sistema para desinfectar el agua de una piscina, aunque es cierto que tiene inconvenientes que en ciertas ocasiones pueden hacernos elegir otra solución.
La mayoría de comerciales o instaladores suelen asesorar correctamente a sus clientes, pero algunas veces, sea por falta de conocimientos o por querer cerrar una venta, se da información insuficiente o inexacta al cliente.
No pasaría nada si el cliente leyese los manuales entregados con los equipos y conociese todos los detalles, pero la verdad es que esta documentación casi nunca se lee.
Por lo tanto, voy a intentar aclarar lo que realmente hay que saber sobre el mantenimiento de los equipos de cloración salina, para evitar problemas muy caros, o incluso peligrosos para la salud a los usuarios que lo desean en el formulario de contacto